Nada me predestinaba a SER empresaria. Todo se lo debo a mi ex-marido y a mi suegro. Tuvieron una disputa familiar y ambos decidieron seguir su camino profesional por separado. Era el año 1999 y decidí entregarme en cuerpo y alma, al sueño y deseo más profundo de mi pareja: montar su (nuestro) propio imperio.
Fueron unos años intensos [2001-2016] de aprendizajes, formaciones, decisiones, éxitos y frustraciones pero cuando pruebas la libertad financiera… no hay vuelta atrás. El año 2016 fue el año de nuestro divorcio y disolución de nuestro patrimonio pero también el año de la creación de ACCION CON ALEGRÍA, SLU (B-75149898)
Desde entonces SOY asesora, consultora para personas que quieren generar ingresos o evolucionar profesionalmente desde la ÉTICA y el AMOR. Para muchos sigue siendo «misión imposible» pero ¡¡esta última palabra no existe en mi diccionario personal!!
Desde el 2020, estoy más empoderada que nunca. ¡El MAL no vencerá ni en mi mundo ni en mi comunidad!
